El sistema inmunológico es la defensa del organismo contra las enfermedades y cada día, nos ayuda a mantenernos sanos al combatir a virus, bacterias y otros patógenos.

Pero a veces, este sistema complejo comete errores y puede alterar su funcionamiento. En esos casos, el propio cuerpo confunde las células sanas con una amenaza y puede atacarlas por error, causando enfermedades autoinmunes.

Un grupo de investigadores de la Universidad Stanford publicaron un estudio que asegura que el motivo por el cual las mujeres son más proclives a sufrir enfermedades autoinmunes se debe al cromosoma sexual X.

La investigación sugiere que un conjunto especial de moléculas que actúan sobre lo dos pares de cromosomas X que tiene las mujeres en todas sus células - en lugar de tener la combinación de cromosomas XY como los hombres que funciona más a la hora de proteger ante estas enfermedades - pueden confundir al sistema inmunitario.

Las enfermedades autoinmunes en cifras:

• Son un grupo de más de 100 enfermedades crónicas. 4 % de la población mundial padecen enfermedades autoinmunes y el 75 % son mujeres
• Muchos trastornos autoinmunes tienden a afectar a las mujeres durante períodos de estrés intenso, como el embarazo, o durante un gran cambio hormonal
• Si hay un caso de enfermedad autoinmune en la familia, es probable que haya otro. Sin embargo, no es una enfermedad autoinmune particular que sea hereditaria, sino que es una tendencia a la autoinmunidad. 

Dentro de las enfermedades autoinmunes más comunes en las mujeres nos encontramos con:

• El Lupus eritematoso sistémico (LES), cuyos síntomas son fatiga, dolor en las articulaciones, erupciones cutáneas, fiebre y sensibilidad a la luz solar.
• La Tiroiditis de Hashimoto que se manifiesta en el organismo mediante fatiga, aumento de peso, sensibilidad al frío, estreñimiento, piel seca y cabello quebradizo. Esta enfermedad afecta a la glándula tiroides, causando una inflamación que puede llevar a una disminución en la producción de hormonas tiroideas.
• La Artritis reumatoide (AR) trae fuertes dolores en las articulaciones, rigidez matutina, inflamación, deformidades articulares y fatiga. Y por tratarse de una enfermedad autoinmune crónica que causa inflamación en las articulaciones, lleva a daño articular y discapacidad. La Esclerodermia es el engrosamiento y endurecimiento de la piel, que trae problemas de circulación, dolor en las articulaciones y problemas respiratorios. Si bien afecta principalmente la piel, también puede dañar órganos internos como el corazón, los pulmones y los riñones.
• La Esclerosis múltiple (EM) causa fatiga, debilidad muscular, problemas de coordinación, problemas de visión, entumecimiento u hormigueo. Es una enfermedad autoinmune que afecta el sistema nervioso central, provocando la inflamación y daño en la mielina, la capa protectora alrededor de las fibras nerviosas.
• La Miastenia gravis se manifiesta con debilidad muscular, fatiga, visión doble, dificultad para hablar y para tragar.
• La Enfermedad de Crohn trae dolor abdominal, diarrea, fatiga, pérdida de peso y fiebre. Por ser un trastorno inflamatorio del tracto gastrointestinal puede afectar cualquier parte del tracto digestivo, desde la boca hasta el ano.

¿Cómo se diagnostican?

A menudo, los médicos tienen dificultades para diagnosticar estas enfermedades, y no existe una prueba específica que las confirme. Esto se debe a que muchas enfermedades autoinmunes tienen síntomas - como los dolores musculares - que son comunes en muchas otras afecciones. Y puede llevar mucho tiempo y visitas a diferentes médicos especialistas para obtener un diagnóstico preciso.

En general los resultados se obtienen a partir de:

PRUEBAS DE LABORATORIO:

Los biomarcadores son características medibles que pueden indicar la presencia o la gravedad de una enfermedad. En el caso de las enfermedades autoinmunes, se han identificado varios biomarcadores específicos que pueden ayudar en el diagnóstico y la clasificación de estas enfermedades. Algunos ejemplos de biomarcadores incluyen autoanticuerpos, citocinas y marcadores genéticos. Estos biomarcadores pueden ser detectados mediante pruebas de laboratorio, como análisis de sangre o muestras de tejido.

TÉCNICAS DE IMAGEN EN EL DIAGNÓSTICO

Además de los biomarcadores, las técnicas de imagen desempeñan un papel importante en el diagnóstico de enfermedades autoinmunes. La resonancia magnética (RM), la tomografía por emisión de positrones (PET) y la tomografía computarizada (TC) permiten visualizar los cambios estructurales y funcionales en los órganos afectados. Estas técnicas de imagen pueden proporcionar información adicional para apoyar el diagnóstico y evaluar la progresión de la enfermedad.

Si bien aún quedan interrogantes por responder, este hallazgo sobre la incidencia del cromosoma sexual X representa un paso importante hacia una comprensión más completa de la autoinmunidad, allanando el camino para futuras investigaciones y terapias más precisas y efectivas.